En una iglesia donde todos somos llamados a evangelizar, nuestro proyecto quiere contar con todos los que forman parte de la comunidad educativa, buscando la comunión y la complementariedad, de modo que puedan ser protagonistas, facilitando las motivaciones y la formación necesarias, evitando el individualismo y actuando como miembros de la iglesia y comunidad. Para ello se tienen en cuenta las necesidades específicas de sus destinatarios, que reconoce en los alumnos, antiguos alumnos, personal docente, personal de administración y servicios, padres y madres de alumnos y comunidad Adoratriz.